ApeDocs: comunidad de profesionales sanitarios en la Web3
Uno de los primeros colectivos más activos en los inicios de la Web2 fueron los profesionales de la salud, sobre todo los médicos. Nombres como los de Fernando Casado, Ana González Duque, Rafael Bravo, Enrique Gavilán, María José Alonso, Rafael Timermans, Vicente Baos, Salvador Casado, Julio Mayol, etc, ya estaban presentes en la blogosfera sanitaria española con sus bitácoras y sus cuentas de Twitter allá por 2008. Presentes y abriéndonos camino a los demás.
Y gracias a ellos aprendimos muchos a entender y ser atraídos a estos sitios como verdaderas comunidades online de encuentro, discusión e intercambio de conocimiento y opinión en todo lo relacionado con la salud.
En esos primeros años algunos veían estas iniciativas con escepticismo y hasta con cierto rechazo. Como siempre, el miedo a lo desconocido genera mecanismos de defensa que dejan al descubierto el temor a innovar…y a equivocarse.
Hoy la foto fija de estos espacios en todos los sectores refleja una saturación de actores — obviamente incluyendo a aquellos que no creían en esto — , un relato en el que predomina la automatización y unidireccionalidad, charlas convulsas, comunidades supuestamente abiertas…pero realmente cerradas, egocéntricas y excluyentes, mensajes sin rigor y de carácter intrusivo (incluyendo la publicidad), discursos inocuos, mucho ruido y un cierto desgaste. Bueno, yo pienso que bastante desgaste.
El MIT publicó este libro blanco tras su summit de 2021; destaco sobre él un mensaje clave: el social media está roto; es el momento de rescatar la verdad y recuperar la confianza.
Como sabéis, creo firmemente en que la evolución hacia la Web3 gracias a la tecnología de cadena de bloques puede ayudar a recuperar la esencia y entusiasmo que vivimos durante esos primeros años de la Web Social. Pero esta vez siendo soberanos del contenido, de los datos que publicamos y de nuestra propia identidad.
Por cierto, fue en el mismo año 2008 cuando comenzamos a sufrir el revés de la crisis financiera global. Y ahora, a mediados de 2022, y sin todavía habernos recuperado totalmente de la anterior crisis, volvemos a estar inmersos en un contexto económico muy inestable, con una expectativa de crecimiento del PIB — 4.3% — desacelerado y muy por debajo de las previsiones, una deuda de las administraciones públicas de 1, 4 mm de €, el 117,7% del PIB a marzo, y con una inflación desbocada que apunta a que a diciembre será al menos del 15%. De nuevo, un escenario de empobrecimiento económico y social. Y, qué paradoja, este momento de cambio tecnológico se enmarca dentro de una nueva y profunda crisis.
Es como si hubiera una correlación histórica entre los tiempos de crisis económica y los grandes hitos tecnológicos.
La tecnología de cadena de bloques irrumpe de manera silenciosa pero firme para, una vez más, cambiarlo todo. Es verdad que al hilo del cryptocrash de estos últimos seis meses hay muchos detractores del valor de esta tecnología, pero la Web3 sin lugar a dudas está camino de convertirse en el Internet que todos vamos a usar en 2030. Cierto que blockchain nació con Bitcoin, pero es que su verdadero valor va mucho más allá del mercado de las crypto monedas: es toda una infraestructura o arquitectura tecnológica que sirve de base para dar soporte a la nueva era digital basada en la descentralización y en la tokenización del todo.
Como afirma Misha da Vinci en este fantástico hilo de su cuenta de Twitter, queramos o no ese futuro ya está sucediendo. Y quedarnos atrás para hacer frente al cambio tecnológico no es una opción. Por ello, hace una llamada a la acción que yo comparto íntegramente y en la que nos invita a:
- Elegir el aprendizaje como estilo de vida
- Pensar en espectro completo
- Conocer las tecnologías emergentes, profundizando en sus fundamentos y encontrando formas de aplicarlas
- Investigar las nuevas startups y proyectos en este campo
Y en esto de curiosear, trastear, aprender e investigar proyectos encontré hace pocos meses una interesante iniciativa global creada e impulsada por profesionales sanitarios construida íntegramente sobre Web3: ApeDocs.
ApeDocs es una comunidad para todo perfil de profesionales sanitarios y que está abierta también a cualquier apasionado del mundo de la salud y la tecnología.
Fundada por los hermanos Usama Syed — dermatólogo — y Shirin Syed — internista — junto con otro médico que dejó a un lado su práctica clínica para dedicarse a las tecnologías emergentes y cuyo avatar es in-denial-doc. Los tres comparten entusiasmo sobre la medicina, el arte y la Web3.
La comunidad está creada en torno a una colección de NFTs registrada en Ethereum de standard ERC721 y disponible en la store OpenSea. Diseñada con el estilo monos aburridos de los míticos token no fungibles de Bored Ape Yacht Club pero adaptada al imaginario, vivencias y experiencias de los profesionales de la salud. Como afirman ellos mismos, es una escasa colección de 10.000 NFTs para los más de 59 millones de trabajadores sanitarios que hay en el mundo.
¿Qué ventajas disfrutan los miembros de la comunidad ApeDocs que disponen de uno de sus NFTs más allá de poderlo usar como avatar para su identidad digital en Web3?
- Acceso al canal Discord para relacionarse con sus pares mediante voz y texto y poder socializar, discutir casos clínicos, compartir experiencias profesionales, etc.
- Dentro de todo el listado de funciones de su canal Discord, hay una sección a la que sólo los poseedores de un NFT ApeDoc pueden acceder a contenidos y foros exclusivos.
- Acceso gratuito a cursos específicos de formación médica
- Códigos de descuento para comprar batas, gorros de quirófano, mascarillas y otras prendas personalizadas con los diseños de ApeDocs
- Entradas gratuitas a eventos IRL (in real life - en persona) organizados por la Familia ApeDocs
- Desarrollo y colaboración en investigación y publicaciones científicas a través del espacio exclusivo Annals of Health Innovation-AHI
- Participación en programas de mentorización profesional entre pares
- Acceso exclusivo al club de carreras profesionales
- Formación de sanitarios en tecnología Web3
- Asistencia y participación a la primera conferencia online ApeDocs que tendrá lugar en una fecha a determinar en invierno de este año
- Etc.
El proyecto se lanzó en marzo 2022, y en la actualidad hay 240 personas que poseen un NFT de esta colección. El mío 🤓 es el que encabeza esta entrada del blog, la del sanitario con el dispositivo de ultrasonidos…y puedo acreditar la propiedad en el código de la transacción del token en este enlace a Etherscan.
En cuanto a sus redes sociales:
- Discord es el canal de base en cualquier comunidad Web3. En el caso del de ApeDocs, hay 2.571 miembros a día de hoy
- Twitter es otra red mandatoria en la comunidad Web3. Estas son algunas de las cuentas más influyentes en este campo. Incluso, el relato social en esta red ha desarrollado su propio slang o código para comunicarse entre sus miembros. En este otro hilo de Twitter de Misha da Vinci encontrarás más de 50 términos Twitter/Web3. El perfil en Twitter de ApeDocs cuenta con 905 seguidores. Desde la función Twitter Spaces se organizan regularmente quedadas para conversar sobre distintos tópicos de relevancia para la comunidad
- Instagram ApeDocs cuenta con 12.100 seguidores, y en su administración utilizan todos los formatos que permite esta red, incluyendo las stories que por cierto están muy bien categorizadas. Si hacéis un poco de scroll en su página IG podréis ver el vídeo de colaboración de ApeDocs con Gary Vaynerchuck en el que conversan con él sobre NFTs y Web3. Es una de sus iniciativas para formar y acercar a los sanitarios a esta tecnología
Bueno, espero haberos aportado con esta nueva entrada del blog. Es verdad es que estamos en los inicios de la adopción de Web3, pero esa es la buena noticia puesto que ahora todos podemos aportar y contribuir a la construcción de esta categoría.
De nuevo, si deseas que comentemos en más detalle sobre esta iniciativa me tenéis a vuestra disposición en las redes sociales centralizadas…y también en las descentralizadas 🤩.
Feliz verano para todos y que nunca, nunca nadie nos robe nuestros sueños e ilusiones o las trate de empobrecer.
Seguimos en contacto.
